Te regalo una habitación para dos y una mano estrechada; te regalo mi sonrisa de lado en el peor momento de mi vida; te regalo un vestido de una niña que lo tuvo todo y lo cambió por la necesidad de sentirse amada; te regalo algunos besos bajo un sol quemante, rodeados de botellas vacías, dos cuerpos tendidos en una manta blanca y tus calcetines vueltos impar; te regalo todo lo que no quieres a fuerza de quererlo todo; te regalo mis dedos jugando con tu cabello en época de humedad y un viento que te vuela el flequillo de lado.
Te regalo cualquier cosa que nunca te he dicho pero que sabes que muero por decir, gritar y escribir dentro de un barco con cientos de personas abordo; te regalo una tarde y una noche sin nadie a 460 km a la redonda y la necesidad de tener que hablarte al oído cuando no queda nada queda todo por decir; te regalo una cena en mi terraza en una cita informal entre pan caliente, cerveza y spaghetti.
Te regalo todo lo que nunca te voy a prometer y te cambio las ganas de huir del mundo por la oportunidad de quedarte a mi lado algo mas que 45 minutos; te regalo mis ganas y mis fuerzas y mi tiempo; te regalo mi sed mis enojos y mis caprichos; te regalo mis malas intenciones y mis terribles obsesiones por las noches para dos; te regalo el abrigo que nunca me he puesto y un abrazo frente a seis de tus amigos; te regalo cuanto pudiera darte sin tener que obligarte a estar conmigo sin necesidad; te regalo eso que no se muere ni se acaba en época de invierno; te regalo un día de la vida que no tendremos y dos niños perdidos, sintiendo el cosquilleo de quienes se creen adultos…
besotes
Lau
